ElPASADOPRESENTEFUTUROde la Abogacía

El propósito de esta sección es compartir las experiencias de los nuevos profesionales y de los que ya ocupan cargos importantes en el mercado.

¿Cómo llegaron hasta sus puestos? ¿Cómo harán los que están llegando? Con ustedes, los protagonistas. 

Ser buen abogado es y será siempre la clave para una carrera exitosa. Pero, ¿qué implica ser un buen abogado hoy?

En los últimos años se han sumado muchas habilidades que son necesarias para la práctica de la profesión.

Para un abogado, responder de manera satisfactoria a las necesidades de las empresas clientes es, en líneas generales, emparentar con los conceptos de empresa, su cultura, objetivos, métricas. Para esto no alcanza con conocer de leyes. Hay otras habilidades en juego.

Los cambios son notables. El acceso masivo a la tecnología, las nuevas tendencias de management y el recambio generacional con nuevos ideales modificaron en buena parte el panorama. Los profesionales de hoy suman a su menú de prioridades otras cuestiones: cómo agregar valor al servicio, cómo se trabaja la marca, cómo y qué comunica el estudio hacia afuera y hacia adentro, cuál es la experiencia de los clientes y cuál la del equipo de trabajo.

La pandemia terminó de acelerar muchos de estos cambios y la situación tiende a seguir ese curso con un ritmo cada vez más veloz. Más allá del valor de poder innovar en algún aspecto, se supone que estar preparados para que las cosas cambien, es un primer gran paso.

El propósito de esta publicación es que las nuevas generaciones de profesionales del derecho reciban las sugerencias y comentarios de los que llevan años de actividad y también, que los nuevos profesionales inspiren a sus pares con experiencias replicables y mejorables.