Según datos de la Cámara Argentina del Libro, Agencia Argentina de ISBN, en 2015, de los 1492 nuevos títulos de libros jurídicos, el 92% se editó en papel, contra un 8% en digital.
En literatura (8398 títulos) la proporción fue de 84% a 16%; en ciencias sociales (5488) 78% a 22%; en textos de estudio (1522), 80% a 20%.
Solo los textos infantiles y juveniles imprimen proporcionalmente más que nosotros (4308 títulos, 95% papel). Y no parece ser un tema de facilidad para apreciar el contenido o el crecimiento de la cultura del libro objeto. De los libros de arte (1226), un 15% se editó en formato digital.