Brenda Vacatello
Brenda se ha desempeñado como abogada en empresas de distintas industrias especializándose en el mercado del petróleo y el gas.
Pasó casi trece años en legales de Shell y actualmente se desempeña como Gerente de Asuntos Jurídicos en el Grupo San Antonio Internacional, que presta servicios integrales al igual que de perforación, mantenimiento y optimización de pozos de petróleo y gas.
En esta entrevista, nos cuenta acerca de su aprendizaje, la formación de los abogados, qué busca cuando contrata un estudio y su actividad en Networking Abogados.
¿Cómo fue tu proceso de aprendizaje en el negocio de petróleo y gas?
Cada vez que ingreso en una compañía, independientemente que venga o no de la industria y más allá de la formación académica, para mi es fundamental realizar un buen proceso de inducción. Reunirme con los referentes del negocio, entender su problemática en la diaria; cómo aportan valor a la compañía; quien es su competencia, sus proveedores; el contacto que tienen con el área de Legales; donde están los desafíos; como venían trabajando hasta ahora y qué oportunidades de mejora ven en el servicio que damos.
Personalmente me gusta mucho la operación, los procesos productivos y aprovecho siempre que puedo para ponerme el mameluco y cuanto EPP (elemento de protección personal) me den, para aprender y vivenciar los temas, que después van a ser sobre los cuales vamos a dar asesoramiento.
Así que, respondiendo a tu pregunta, el proceso de aprendizaje en la industria empezó así. Tuve también la suerte de tener jefes y compañeros de trabajo que acompañaron el proceso y me ayudaron en este sentido.
En Shell, la primera compañía de petróleo y gas que trabajé, hice muchas visitas a la refinería; pasé un día entero en un buque tanque donde hasta almorzamos con el capitán; atendí un día una estación de servicio; en Kimberly-Clark pedí hacer muchas visitas a las plantas de pañales y personal care. Ahora en San Antonio Internacional fue un desafío enorme porque, por las restricciones sanitarias, todavía no pude visitar los Distritos o las Bases, pero espero que llegue la oportunidad porque, aunque el tiempo pase, siempre suma muchísimo.
Por otro lado, la industria del O&G es tan diversa que considero que la experiencia es muy difícil de equipararla con lo académico. En mi paso por Shell, por ejemplo, era como trabajar en varias compañías distintas ya que el negocio de downstream que tenía Shell en Argentina estaba muy diversificado: una cosa es vender químicos y otra cosa es vender combustible a una compañía de aviones; o bien, vender garrafa social con toda la problemática del LPG o elaborar combustibles o vender nafta en un surtidor. El negocio del upstream, por otro lado, es otro mundo. Es enorme y da para hacer lo que más te guste, hay para entretenerse.
Perfil
Brenda Vacatello es abogada por la Universidad de Buenos Aires, donde también realizó el Programa de Actualización en Petróleo y Gas. Realizó las Diplomaturas en Derecho de Trabajo y Relaciones Laborales y Derecho y Política Ambiental (Universidad Austral) y la Diplomatura en Compliance y Derecho Penal (IAE Business School). También realizó el Programa Ejecutivo de Certificación Internacional de Ética y Compliance (Universidad del CEMA).
¿Qué crees que tiene que saber un abogado hoy, respecto a la formación que recibiste?
Desde mi lugar creo que hoy el abogado inhouse en Argentina (a diferencia de lo que ocurre en otros países) tiene que ser un gran generalista, tiene que tener la flexibilidad de poder salir de un tema y entrar a otro muy rápido, y a su vez tiene que tener la capacidad de mirar un tema y ver las todas las aristas que puede tener.
Por lo que considero que quien recién termina su carrera y se quiere dedicar a ser abogado inhouse, tiene que tener la capacidad de ver en general y poder relacionar una cosa con la otra. Por otro lado, creo que la universidad da una base gigante pero los abogados siempre estamos en formación, así que lo que tiene que saber un abogado hoy es que tiene que seguir estudiando, formándose y no necesariamente en temas exclusivamente de Derecho. Creo que hay muchos temas de soft skills que justamente la universidad no aporta y que hay que si o si buscarlos en otros ámbitos. Tema aparte es la enorme posibilidad que la tecnología hoy da a nuestra profesión. Es apasionante y sin dudas un abogado hoy tiene que tener en claro que su trabajo va a ser distinto en el corto plazo. El cambio que la tecnología está haciendo en la profesión es increíble. Podemos pasar horas solo hablando de eso.
En resumen, creo que hoy un abogado inhouse en Argentina necesita ser un excelente generalista. Tiene que tener la capacidad de asesorar al negocio en la diaria, de poder hacer control de gestión de abogados externos, profundizar muchísimo en temas de IT y tener la capacidad de gestionar en general.
San Antonio
La empresa donde se desempeña Brenda se presenta como “la mayor compañía perforadora de la Argentina y líderes en servicios de mantenimiento y optimización de pozos de petróleo y gas” y muestra como propósito “trabajar para proveer energía al país”.San Antonio tiene más de 60 años de historia y cuenta con bases en las principales localidades donde se desarrolla actividad petrolera, lo que le permite acompañar a sus clientes, con tiempo de respuesta superiores y con los mismos estándares de calidad.
¿En qué ponés foco para contratar un estudio, como proveedor externo?
En lo personal busco un abogado externo que hable el idioma que habla todo el mundo…no “idioma abogado”. Soy de buscar soluciones, recomendaciones concretas, por lo que no soy de los abogados que les gusta un memo eterno que me siembra más inquietudes que recomendaciones. Y por supuesto, también busco tarifa. Soy de la idea de que –si los tiempos dan- hay que pedir cotización a varios estudios.
Por otro lado, sobre todo en temas de litigios, creo que es fundamental el rol del abogado inhouse en el control de gestión de los estudios externos y para eso –más allá de la ayuda fundamental que la tecnología nos da- creo que es importante también que el abogado externo entienda su rol en este proceso. Es un trabajo 100% en equipo donde cada uno agrega valor. Un abogado externo no solo tiene que ganar un juicio o minimizar un impacto, también tiene que tener en claro que tan importante como eso es reportarlo bien, en tiempo, en el formato correcto que permita un buen control de gestión. Porque si bien para la compañía el logro se concretó si la previsión o la estimación de riesgo no estaban bien hechos, el trabajo se hizo a medias.
¿Cuáles son los requisitos que debe cumplir un abogado, para formar parte de tu equipo?
Para mí hay un montón de cuestiones técnicas que se aprenden, pero hay temas que no se pueden transmitir como el conocimiento. Valoro mucho el vínculo personal, las relaciones interpersonales y esto es algo que busco en alguien para trabajar juntos.
Cuando hago una búsqueda, dentro de las posibilidades, trato de seleccionar a una persona en forma integral, busco mucho lo técnico, pero también trato de tener en cuenta soft skills.
Busco gente que tenga capacidad de adaptarse, de funcionar bien dentro del equipo, que sea flexible, empático, que no le tenga miedo al cambio sino por el contrario que esto le entusiasme, que tenga ganas, hambre, garra.
¿Cuáles son los cambios que percibís, como cabeza de equipo, para la nueva normalidad?
Creo que con todo lo que pasó, los abogados tenemos que estar preparados para actuar rápido y ser pragmáticos. Y tal vez, estar dispuestos a dar recomendaciones no tan ortodoxas, sino más bien rápidas y con alto impacto en el corto plazo. No tenemos tanto tiempo para analizar los temas, no hay tanta claridad normativa.
¿Confiás que el proceso de formación se produzca dentro de la empresa?
Si totalmente. El negocio se aprende en la diaria, hay que adaptarse. Personalmente me gusta buscar la oportunidad de mejora continua en el sector en el que trabajo, me gusta mucho estandarizar procesos, mejorar la gestión y esto lleva a que el proceso de formación de todos los miembros del equipo se de en forma natural, acompañando los cambios.
Respecto a la virtualidad en el trabajo, ¿crees que se va a mantener?
Esto va a depender mucho de la cultura de cada empresa, pero en lo personal creo que sí, que va a marcar sin dudas un antes y un después.
Soy mamá y tuve la suerte de trabajar en una compañía que desde hace muchos años me dio la oportunidad de hacer home office cuando nadie en legales lo hacía. Mis hijos eran chiquitos y me ayudó muchísimo. Celebro terriblemente el cambio cultural que se está dando y espero que las compañías lo tomen como un cambio sustentable en el tiempo y que los empleados, a su vez, lo valoren, lo cuiden y lo honren. Para mí es un beneficio espectacular. Después hay que ver la realidad de cada uno, es muy personal. Pero creo que, sin dudas, esta etapa trajo muchísimos temas sobre la mesa, y se generó un cambio rotundo desde el punto de vista tecnológico, que nos hubiera llevado mínimo 10 años llevar adelante.
En los tribunales, el cambio fue enorme. Imposible olvidarnos de lo que era hacer tribunales hace un tiempo: filas para subir al ascensor, filas para ver un expediente. Horas desperdiciadas. La famosa “media hora”, sellar un oficio, ver los listados, diligenciamientos. Parece que hablamos de otra era. Todavía hay mucho por hacer, mucho por mejorar y, sobre todo –más allá de lo “operativo”- creo que nuestro querido país necesita una mejora en el servicio de administración de justicia que va más allá de estos temas.
Networking Abogados
Paralelamente a sus tareas en San Antonio, Brenda es lider y Cofundadora de Networking Abogados, una red de abogados de empresa y estudios jurídicos.
El grupo es en una red de colaboradores que se dan, en su mayoría, dentro de un grupo de whatsapp: “Por momentos siento que es solo un grupo de whatsapp, pero por momentos siento que somos muchísimo más; realmente es una red, nos ayudamos un montón. Hacemos encuentros y charlas cada dos meses. Cuando se pudo llegamos a hacer encuentros presenciales, con protocolo, por supuesto. Hemos realizado charlas de temas diversos, la idea es mantener la simpleza del grupo e ir acompañando los cambios”, añade Vacatello.“Es un grupo que da para muchas cosas, pero cada vez que tratamos de sumarle institucionalidad, se complica. Creo que el gran valor agregado de Networking Abogados es que es algo sin una institución atrás, con dinámicas que se van definiendo sobre la marcha. Pusimos reglas básicas de convivencia. Un poco la razón del grupo es que se vaya dando como se da, por supuesto con un mínimo de normas”, puntualiza Brenda.
Consultada por si el grupo cambiará su funcionamiento a algo más presencial, añade: “Desde la virtualidad funciona y sirve. La idea sería que cada dos meses nos juntemos a tomar algo, ¡que fue como empezamos! Me gustaría que podamos juntarnos más porque creo que en esos ámbitos las relaciones se pueden fomentar y hacer más naturalmente. Vamos a ver cómo sigue. Calculo que va a ser un híbrido, como la mayoría de las cosas”.